Jimmy Fallon recuerda a David Wells festejando loco tarde con el elenco de 'SNL' antes de lanzar el juego perfecto

El 17 de mayo de 1998 Yankees de Nueva York el lanzador David Wells se enfrentó con 27 bateadores de los Minnesota Twins. Los retiró a todos y obtuvo el decimoquinto juego perfecto en MLB historia. También lo hizo mientras lidiaba con muy poco sueño y resaca. Jimmy Fallon proporcionó algunos detalles sobre este juego, así como la noche que lo precedió.

Hablando con Adam Sandler durante un episodio en casa de The Tonight Show protagonizada por Jimmy Fallon, Fallon proporcionó información de fondo sobre esta noche con Wells la noche anterior a su juego perfecto. Al parecer, se había dirigido a la SNL fiesta posterior con el ex miembro del reparto Horatio Sanz y SNL creador Lorne Michaels. Wells también estuvo presente durante la noche y se quedó despierto hasta muy tarde con todos los miembros del reparto, y finalmente se dirigió a casa mucho más tarde de lo que su entrenador y gerente preferirían.

'Estamos pasando el rato, tomamos bebidas, vamos tarde', dijo Fallon. 'Se está haciendo tarde. Probablemente 5, 5:30. Lorne se va, todavía estoy allí. Creo que me voy alrededor de las 5:45, 6 de la mañana. Me voy de la fiesta. Voy a casa, me estrello y me despierto al día siguiente. Tiene que ser 1, 1:30 del día siguiente. Enciendo la televisión y David Wells está lanzando.

Como Fallon explicó, primero pensó que esto era solo el Canal 11 reproduciendo un clásico juego de los Yankees. No tenía forma de pensar que Wells estaba realmente en el montículo y retiraba a cada bateador que enfrentaba. El lanzador de los Yankees le había sobrevivido a él, a Michaels y a Sanz, pero aún así se las había arreglado para ir al estadio y participar en este enfrentamiento.

Fallon no fue el único SNL miembro del reparto con una historia sobre Wells. Sandler también reveló que el lanzador de los Yankees pasó un tiempo considerable con su elenco a principios de la década de 1990. Aunque el actor no proporcionó ningún detalle de su tiempo pasado con Wells.

Bien despues escribi sobre este juego perfecto en su autobiografía, 'Perfecto, no lo soy'. Describió esta actuación escribiendo que estaba 'medio borracho, con los ojos inyectados en sangre, aliento de monstruo y una resaca furiosa y que sacudía el cráneo'. A pesar de lidiar con este problema, se las arregló para lanzar un juego perfecto y ayudar a los Yankees a asegurar la victoria por 4-0.